dimarts, 6 de maig del 2014

No al nombre de Suárez para una calle de Ondara.

    En el último Pleno del Ayuntamiento de Ondara gobernado por el PP se aprobó la propuesta presentada por este  grupo para que una importante avenida del  pueblo lleve el nombre de Adolfo Suárez. Es verdad que desde la muerte de esta persona, los  medios de comunicación, Radio, prensa y televisión, han llevado a cabo una campaña sin precedentes, de enaltecimiento  y exaltación  del  personaje  y del papel que este desempeñó  durante la transición. El mismo mensaje que durante más de treinta años han hecho llegar a los ciudadanos y que tanto daño ha hecho a la democracia, al progreso y al prestigio y credibilidad de este País pues a día de hoy el Estado Español continúa bajo la enorme influencia de las fuerzas que entonces controlaban el régimen fascista de Franco. (De aquellos polvos tenemos estos lodos)

    Pues bien, una vez más hay que recalcar, que ni la transición fue tan modélica, ejemplar ni tan pacifica ya que no hay que olvidar que en el transcurso de  esos años se produjeron muchas decenas de muertos, 600 según algunas fuentes, la mayoría víctimas de las organizaciones policiales y de los grupos fascista, grupos que nunca fueron descubiertos ni castigados.

    Lo cierto es que Adolfo Suárez no fue más que el encargado de velar por las esencias franquistas y de llevar  a cabo el proyecto Capitalista y monárquico, diseñado por la Comunidad Económica europea y los grandes intereses Geopolíticos, e Imperialistas de EE.UU  y su brazo armado la OTAN. Algo que probablemente no hubiese sido tan fácil sin el apoyo, y la colaboración más rendida e incondicional de los Partidos llamados de izquierdas.  En todo  caso si  de alguien ejemplar, hay que hablar, sin ninguna duda, no fue otro que el conjunto de ciudadanos sacrificados, y que tuvieron que abdicar de todos sus sueños, esperanzas y derechos, de su memoria e historia colectivas, enviar al olvido los cientos de miles de muertos enterrados en las cunetas, y que tuvieron que someterse a los intereses más encarnizados de los fascistas, los terratenientes, la oligarquía más reaccionaria y la Iglesia.

    Que a estas alturas el PP quiera poner placas y calles con el nombre de Suárez, es de lo más normal y está en el orden de las cosas, al PP no le gustan ni la verdad, ni el libre pensamiento, ni la objetividad, ni la reflexión y sobre todo la inteligencia y el libre albedrio de los ciudadanos. Lo peor, es que como siempre la izquierda en este caso el PESOE  haya votado con un Sí a semejante propuesta y los de Compromís con una abstención. ¿Tan mal andan estos políticos de historia y de reflexiones y debates críticos, que a todo dicen que sí postrados de hinojos, siempre, ante el poder? Para cuándo la Verdad, la Justicia y la dignidad.



     Francisca Lorenzo Rodríguez.

Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada